Para toallas más suaves, debes ventilarlas bien después de que se hayan secado y evitar el uso de jabones comerciales, ya que contienen sustancias químicas fuertes que pueden dañar las fibras.
¿Sabes cómo conseguir fácilmente toallas más suaves?
El tiempo consume todo tipo de tejidos , pero especialmente las toallas que están constantemente expuestas a cambios tanto de temperatura como de humedad.
A medida que el material se desgasta, notará que sus toallas se vuelven rígidas y gruesas si no hace nada para evitarlo.
¿Por qué las toallas se ponen feas?
El agua dura contiene minerales que se adhieren a las fibras.
Esto provoca que las toallas pierdan su suavidad hasta el punto de que se rasquen la piel si no se toman las medidas preventivas.
Los suavizantes de telas contienen lubricantes y silicona.
Estas sustancias crean una película que evita que las fibras absorban agua. Aunque esto parece un poco paradójico ya que los suavizantes de telas primero ayudan a suavizar las toallas, a la larga tendrán el efecto contrario.
El planchado envejece las fibras
Como todos sabemos, las altas temperaturas pueden hacer que las cosas se deterioren más rápido, mientras que mantenerlas frescas prolonga su vida útil. Así que si eres de esas personas que tienen que planchar todo a la perfección, hazlo cuando la plancha esté casi fría.
No dejamos que se ventilen lo suficiente
Si seca las toallas con una cuerda, agítelas de vez en cuando para que circule el aire.
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5 trucos para toallas más suaves
Prelavar con limón y vinagre antes de ponerlos en la lavadora.
Antes de lavar tus toallas, prueba usar un prelavado con agua fría donde le agregas un chorrito de jugo de limón y vinagre.
No te preocupes por el olor, desaparecerá. Simplemente lava tus toallas en la lavadora como lo harías normalmente. Después de lavarlas, no notarás el olor de ninguno de estos ingredientes, pero notarás cuánto más suaves se sentirán tus toallas.
2. Evite el uso de suavizantes de telas químicos.
Como mencionamos anteriormente, son los beneficios iniciales de estos productos los que finalmente conducen a toallas rígidas. Crean una barrera invisible que evita que las fibras absorban el agua correctamente.
3. Agregue amoníaco y vinagre al ciclo de lavado.
El amoníaco evita que los detergentes se adhieran a las sustancias, mientras que el vinagre tiene el mismo efecto sobre los minerales que se encuentran en el agua dura.
El doble efecto de estos dos ingredientes es garantía de toallas suaves.
4. No use demasiado detergente
Todos hemos escuchado el dicho de que “menos es más”, y esto es especialmente cierto cuando se trata de usar jabones para la ropa y detergentes . Usar demasiado puede dejar residuos en las toallas.
Usar algunos de los trucos anteriores es solo una pequeña cantidad de detergente suficiente para mantener las toallas más suaves.
5. No llene demasiado la máquina
Para que estos consejos y trucos funcionen, debe tener cuidado con la cantidad que se lava a la vez, porque las máquinas abarrotadas pueden hacer que estos agentes sean menos efectivos.
Todas las toallas que se froten entre sí en una máquina abarrotada harán que pierdan su suavidad.
¿Es importante la secadora para toallas suaves?
La respuesta es sí, mucho más de lo que crees.
Pon una pelota de tenis en la secadora junto con tus toallas. Contribuirá a que las toallas sean más suaves y evitará que se froten entre sí.
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Si no tienes secadora, aquí tienes otro consejo para ayudarte.
- No expongas las toallas a altas temperaturas durante mucho tiempo, ya que esto endurecerá la tela.
- Recuerda lo que dijimos al principio: sacúdelos de vez en cuando mientras se secan al aire para ayudarlos a respirar.
Con estos trucos, seguro que tendrás toallas cómodas y suaves, y al mismo tiempo ahorrarás dinero en jabón.
Prueba estos consejos hoy, no te arrepentirás. ¿Estás listo?